![](https://static.wixstatic.com/media/91e965_65c5dc9234834e1ab2698fc3bc913f3d~mv2_d_2592_1732_s_2.jpg/v1/fill/w_288,h_192,al_c,q_80,usm_0.66_1.00_0.01,blur_2,enc_auto/91e965_65c5dc9234834e1ab2698fc3bc913f3d~mv2_d_2592_1732_s_2.jpg)
![](https://static.wixstatic.com/media/91e965_26f6c0f4854d48c18df5afa5d7c36427~mv2.jpg/v1/crop/x_213,y_19,w_235,h_347/fill/w_301,h_447,al_c,lg_1,q_80,usm_0.33_1.00_0.00,enc_auto/91e965_26f6c0f4854d48c18df5afa5d7c36427~mv2.jpg)
CHILOÉ,
UN DESTINO QUE DEBES CONOCER
Chiloé se sustenta en dos grandes pilares: un entorno natural de gran belleza y atractivos culturales únicos. En este archipiélago, coexiste una gran diversidad de ecosistemas, que lo convierten en un lugar inimitable y el hogar de especies vegetales y animales endémicas. Además, su accidentado relieve da origen a paisajes llamativos, como, por ejemplo, formaciones naturales costeras, lagos, lagunas, ríos y bosques siempreverdes.
La rica cultura de Chiloé y el peculiar estilo de vida de sus habitantes atraen a visitantes de todo el mundo, que recorren, encantados, sus ciudades y pueblos enclavados a orillas del mar o en medio de los valles.
Llama la atención la vida del chilote, que depende básicamente de los recursos marinos y agrícolas para subsistir; su forma de compartir en familia, su historia, que se remonta a varios siglos, y las manifestaciones culturales, como las iglesias de Chiloé, algunas de las cuales son Patrimonio de la Humanidad UNESCO.